Cómo suceder en silencio
How to happen in silence
Laminas lenticulares caladas y acrílico. Dimensiones variables. / Cut lenticular sheets and acrylic. Dimensions variable.
Cómo suceder en silencio continúa el trabajo que Natalia Revilla inició durante el primer confinamiento del 2020 en el que, alejada de su taller, se propuso como consigna responder cuáles eran las posibilidades de realizar una obra participativa desde el encierro. Para ello, Revilla invitó a un grupo diverso de personas a compartir frases o palabras que les resonara durante la cuarentena obligatoria, con el objetivo de interpretarlas a través del dibujo y valiéndose de los únicos elementos que tenía a mano: papel, tinta y pincel.
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How to Happen in Silence continues the work that Natalia Revilla began during the first confinement of 2020 in which, away from her workshop, she proposed as a slogan to answer what were the possibilities of carrying out a participatory work from confinement. To do this, Revilla invited a diverse group of people to share phrases or words that resonated with them during the mandatory quarantine, with the aim of interpreting them through drawing and using the only elements he had at hand: paper, ink and brush.
La figura humana predomina y el paisaje emerge a través de su sombra. Esta proyección del paisaje a partir del cuerpo ausente devela la reflexión de Revilla en torno a la percepción e idealización de la naturaleza desde el encierro, pues este reconfigura los vínculos humanos, en tanto la distancia se decreta como convención.
En Cómo suceder en silencio Natalia Revilla propone un giro y desarrolla una propuesta que cuestiona al paisaje desde el artificio y al cuerpo desde lo fragmentario. Si bien esta propuesta expositiva ofrece las pistas del trabajo artístico que Revilla viene realizando desde hace más de 10 años —como el calado, el dibujo en tinta o el papel quemado—, también acerca su nuevo vínculo hacia la plástica. Y es que la artista retoma las imágenes elaboradas a partir de las frases, pero troca el dibujo en escultura generando una obra volumétrica y tridimensional con la utilización de acrílico y láminas lenticulares a todo color que muestran paisajes artificiales de playas, ríos, bosques y mares, así como imágenes de la naturaleza descargadas de internet.
La elección de estas láminas se sustenta, por un lado, en su contenido y en su materialidad plástica, los cuales le permiten a Revilla ampliar su reflexión en torno a la interacción humana con la naturaleza, una interacción que tiende más a la simulación que a una convivencia real; por otro, hace énfasis en el juego de percepciones y en la sensación de realidad, profundidad y movimiento que producen las mismas; y, finalmente, le permite experimentar por primera vez con el color, lo que denota un nuevo ciclo en su práctica artística.
Las imágenes que conforman esta propuesta expositiva no solo exponen al paisaje como un constructo, sino que se presentan como una constelación de relatos íntimos que transitan desde las narrativas de la incertidumbre, la ausencia y la soledad, hasta la proyección de la naturaleza a través de su sombra.
Cómo suceder en silencio se presenta como una interrogante desprovista de signos de interrogación; sin puntuación, sin final. Una pregunta indirecta cuya aparente quietud exige movimiento para asirla.
Luisa Fernanda Lindo
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The human figure predominates and the landscape emerges through its shadow. This projection of the landscape from the absent body reveals Revilla's reflection on the perception and idealization of nature from confinement, since it reconfigures human ties, while distance is decreed as a convention.
In How to Happen in Silence Natalia Revilla proposes a turn and develops a proposal that questions the landscape from the artifice and the body from the fragmentary. Although this exhibition offers clues to the artistic work that Revilla has been doing for more than 10 years — such as fretwork, ink drawing or burned paper — , it also brings her new link to plastic arts closer. And it is that the artist takes up the images made from the phrases, but changes the drawing into sculpture generating a volumetric and three-dimensional work with the use of acrylic and full color lenticular sheets that show artificial landscapes of beaches, rivers, forests and seas. , as well as images of nature downloaded from the internet.
The choice of these sheets is based, on the one hand, on their content and their plastic materiality, which allow Revilla to broaden his reflection on human interaction with nature, an interaction that tends more to simulation than to a real coexistence; on the other, he emphasizes the game of perceptions and the sensation of reality, depth and movement that they produce; and, finally, it allows him to experiment with color for the first time, which denotes a new cycle in his artistic practice.
The images that make up this exhibition proposal not only expose the landscape as a construct, but are also presented as a constellation of intimate stories that range from narratives of uncertainty, absence and loneliness, to the projection of nature through of his shadow .
How to happen in silence is presented as a question devoid of question marks; no punctuation, no end. An indirect question whose apparent stillness requires movement to grasp it.
Luisa Fernanda Lindo